SIENTATE.
Elimina la creencia de que
se escucha mejor tu voz al aire si estas de pie. Con la tecnología
de hoy, el acústico mejorado y en general el equipo de primera calidad, el trabajo está hecho. Siéntate y ponte cómodo/a; estar parado/a solo te
dará cansancio de espalda y de pies.
NO USES LA CABINA COMO PUNTO DE REUNIÓN.
Las cabinas de radio generalmente
son pequeñas, solo están diseñadas para contener el equipo de
transmisión,
el material de apoyo y el número de sillas de las personas que sean
necesarias. La radio
transmite
las 24 horas al día y siempre estará en uso por alguien; se respetuoso y mantén libre este espacio, evitando meter gente que no tiene porque estar ahí.
ORGANIZATE.
Ordena y administra
tus recursos con gran responsabilidad. Llega 15 minutos antes de tu
turno
y ubica las necesidades para comenzar tu jornada al aire. Cuando sea
momento de partir, retírate lo más pronto posible, un compañero
locutor
sigue en el siguiente turno y ocupa espacio para organizarse.
Generalmente
son cruciales los primeros minutos, se debe revisar que avisos o memos
hay de la dirección. Siempre habrá novedades, consideraciones,
instrucciones.
Para eso quieres estar concentrado y por supuesto sin distractores de
gente en cabina.
NO FUMES.
Olvídate de fumar en cabina,
está prohibido en la mayoría de las estaciones, en algunas incluso comer dentro
de cabina no está permitido; imagina los olores desagradables que provocarían. La cabina
siempre debe lucir lo mejor posible porque nunca sabes cuándo llegará
una visita, un entrevistado o el dueño de la radio.
APAGA EL CELULAR.
La radio,
los radioescuchas y sus menesteres son primero. No hay cabida
profesional
para que atiendas las llamadas de familiares, novios celosos,
vendedores
de seguros, psicólogos, etc. Olvídate de tu vida personal en cabina,
allí adentro eres otra persona y tienes que enfocarte para que no haya
errores de operación o locución y sobre todo enfocar tu atención en todas
las áreas para las que tienes que estar al 100%. En situaciones de
emergencia sería prudente poner tu celular o móvil en vibración para
que no interrumpa una transmisión en vivo y regresa la llamada al
final
de tu turno.
EVITA EL DESORDEN.
Es muy
fácil que se acumulen todos los diarios o periódicos de la ciudad
en cabina, hojas, memos, etc. Hay locutores que toman nota de cada
llamada
o simplemente se hacen recordatorios a sí mismos. Evita todo lo que
estorbe, entre más despejada la cabina, será un lugar más agradable
dónde transmitir y tendrás esta sensación de liviandad y limpieza.
MANTEN LIMPIO TU EQUIPO DE TRABAJO.
Procura la limpieza de la
esponja protectora del micrófono. Esta es una parte muy sensible para
almacenar gérmenes. Exige que se reemplace periódicamente. Tu voz
debe estar impecable. Debes evitar cualquier amenaza de infección en
tu garganta.
SE PULCRO/A.
Cuida tu higiene personal. Quizá
te suene risible, pero la cabina o estudio es un lugar pequeño y a
pesar
contar con aire acondicionado, se guardan mucho los olores. No te gustaría que tu relevo en cabina te haga conocido por tus no muy agradables olores ¿verdad?.
SE PRECAVIDO/A.
Persona precavida vale por dos. Siempre ten a la mano el
material de emergencia como lo son números telefónicos de los
departamentos
de publicidad, continuidad, producción, ingeniería, etc. Así mismo
material de respaldo por si hubiera alguna falla técnica al aire.